Sabía que no llegarias...
¿ Sabes? lo hice a propósito. Queria convencerme a mi misma de que por más que te dé no podré obtener nada de tí. Vez tras Vez he vuelto a querer, a esperar, a confiar... y no puedo seguir permitiéndomelo. Tuve que hacerlo así tan crudo, así tan real.
Es verdad...
Te cité en un horario en que sabia que tendrias que sacrificar un poco de tu vida para verme, así es, estaba todo planeado. No, no estoy decepcionada, eso lo pasé ya hace tiempo. Esta vez fuiste el medio.
¿Por qué?
He intentado muchas veces sacarte de mis pensamientos. Dejar de estar para tí cada vez que lo necesites... de intentar ser amiga, amante, hermana y baúl de secretos sin obtener nada a cambio... pero no, sola no puedo, es por eso que he tenido que pedirte ayuda.
¿Puedes creerlo?
Mis ojos se negaron a derramar lágrimas. Hay una mezcla de satisfacción y tristeza que me da tranquilidad y me revuelve el estómago. Por momentos mi mente se queda en blaco... quizá intentando digerir la repercusión que tendrá esta acción.. no en tí, en mí.
¿No te cansas?
No puedo entender cómo si no hay amor sigues mis pasos hasta encontrarme no importa cuánto huya de tí. Yo ya no tengo fuerzas para seguir...
ni permanecer.
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